Mi primer descargo
Siempre quise tener un basurero privado, para poder disfrutarlo y llenarlo de todas esas cosas que me sobran y que a veces me saturan. De hecho he pensado -o mejor dicho soñado- que algún día ese basurero se convertirá en un lugar de esparcimiento, donde las pestes que emanen mis desechos serán como ráfagas inspiradoras que estimulen la conciencia de la gente. Algo así como un parque temático de la basura o, como un Fuckin' freak show.
EL JARDÍN DE NARCISOS
Si me preguntan por qué soy tan egocéntrico siempre respondo: el sistema tiene la culpa. Con todos sus códigos publicitarios, segmentación de consumidores y nuevas mitologías, nos hacen creer que todos somos "especiales". Si no me creen, pregúntense; ¿por qué hay tantos blogs ahora?